Así fue o podría haber sido

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¿Habéis recibido alguna vez un mensaje de WhatsApp de alguien que no conocéis? ¿Nunca? Un chico me había conocido en una discoteca y quería volver a verme. Le había dicho que me llamaba Susan. Y ahí le tenías, buscando a Susan desesperadamente. Estuve a punto de llamarle y quedar. Pero resulta que nos habíamos visto en un garito de Houston. Claro, ahí teníamos un problema. Típico de Houston. El caso es que, como ya sabéis, yo no me llamo Susan y nunca he estado allí (eso no lo sabíais). Así que tuve que declinar la oferta. En otra ocasión me escribieron para comprarme un reloj. Que yo al mío le tengo mucho cariño, pero es que me ofrecían 10.000 francos suizos. Lástima que no tengo ningún Rolex a la venta. Otros me escriben para cambiarme de compañía. Con lo que me gusta a mí la compañía que tengo. Que no les cambio por nada del mundo. Buena gente, amigos de sus amigos y siempre están ahí. O aquí. Según el momento. Ya me entendéis. Pero esta semana, me pasó una cosa notable. He

Canciones desencantadas

¡Ya está bien de que los cantantes y cantantas canten siempre las mismas canciones!  Valga la abundancia de redundancia. Hay que modernizarse un poco y estar a la altura de los tiempos que corren. No digo yo que Isabel Pantoja renueve su repertorio con canciones de Metallica. O que los Rolling Stones canten Despacito. Aunque a su edad, igual se lo tendrían que pensar y bajar un poco el ritmo. 

Lo que quiero decir es que habría que dar una vuelta a algunas canciones. Tampoco estoy diciendo que Joan Manuel Serrat se ponga a perrear en medio del Mediterráneo. Me refiero a la canción, no que se ponga a bailar en mitad del mar, que tampoco quiero que tengamos un disgusto.

Me explico. Mi idea es que los cantantes sigan con sus canciones, Georgie Dann y su barbacoa, Serrat en el Mediterráneo, Metallica con su marinero de luces y… me estoy volviendo a liar.

A ver si ahora…. Lo que quiero decir es que es posible que haya que cambiar algunas canciones antes de que se ofendan algunas personas. Aunque creo que la gente se va a ofender de cualquier manera.

La barbacoa

Estoy convencido de que Georgie Dann lo hacía con su mejor intención. Lleva años invitando a la gente a comer chorizos parrilleros, muslitos y pechuga… Incluso a la vecina que es muy mona y toma el sol en la tumbona le saca algo sencillo. Pero ella quiere el solomillo que le gusta mucho más. Palabrita del niño Jesús que la canción dice eso. Georgie, pon algo de ensalada, algo para invitar a los amigos veganos, o para los que quieren cuidarse el colesterol. Poca broma.

¡Buenas noches, señora!

Hablando de Bertín. Que ya tiene una edad para seguir siendo Bertín, también te digo. Y que mide casi tres metros para que le llamen así. Peor, fue lo de sus padres llamándole Norberto. Pero esa es otra historia. Lo de buenas noches señora es una canción de un vagabundo que rueda por el mundo (hay pocas cosas que rimen con vagabundo, Facundo, abundo, profundo… Aquí escogió la mejor opción. Pero aquí el cachondo de Bertín se despide de la churri con la que se ha liado, y encima le da recuerdos al señor. Eso se lo puede permitir Bertín con lo grande que es, pero un poco de recochineo sí que hay.

¿Qué líos se traen Don Pepito y Don José con las abuelas?

A mí la vida privada de estos dos señores, me da igual. No creo que haya que hacer un especial Sálvame sobre si pasa el uno por la casa del otro. Pero claro, que les presentamos diciendo que eran dos tipos requetefinos, casi divinos, pero luego van viéndose con las abuelas respectivas. A tope con la libertad sexual de las abuelas de cada uno, pero está feo ir por ahí diciéndolo. Y en alto. Y más aún cantando. O igual podría actualizarse con otros personajes.

¿15 años?

En el momento en que salió la canción del Dúo Dinámico es probable que estuviera bien visto que esos jovenzuelos dicharacheros y pizpiretos se enamoraran de una chica de 15 años. ¿Y los dos a la vez? ¿De la misma?  En su defensa podemos decir que tenían 20 años cuando la cantaban y que la canción es de 1962. La niña debe tener ahora… 15 menos 1962… si estamos en 2021… Da igual. Señores dinámicos, sigan cantando, que esto es muy estresante.

¿Seguirá teniendo alegría en el cuerpo Macarena?

En el caso de Macarena y la de la chica que le gustaba la gasolina es más un tema personal. Que es posible que ya no tenga alegría. O que hubiera vuelto con su novio Vitorino. Y qué me dices de la que le gustaba la gasolina, dame más gasolina. Que en aquella época no tenían los precios que tienen ahora. ¿Se habrá pasado al diésel? ¿O tiene un coche eléctrico? Por favor, actualicen la canción y pónganos al día.

Flacas, gordas y mamones

Ya que nos ponemos políticamente correctos, igual es momento de dejar de insultar a la gente en las canciones. Que darías lo que fuera por un beso de la flaca. Y si a la chica le cambia el metabolismo, o coge algún kilo ¿Ya no hay beso que valga? Otros las prefieren muy muy gordas, supergordas y apretás. Muy bien. Pero no hay razón para decirlo a voces. ¿Por qué ese odio a los mamones por parte de los Hombres G? Somos todos hijos de dios. También los mamones, y no está bien desear a nadie que sufra. Y la rima de picapica con marica, también se podría dar una vuelta. La escena de boxeo está a la altura de Toro Salvaje. 

¿Hay algo más bonito que ser mamá?

Os lo pregunto como si supiera lo que es ser mamá. O papá. El caso es que hay muchas maneras de ser madre. Aquí tenéis un ejemplo… Puede que no sea el mejor de todos los ejemplos, pero ahí está.

Papi chulo

Aquí también hay para los papis. Que no tengo nada en contra de la canción, pero creo que aquí hay un caso flagrante de publicidad engañosa. Uno espera que le cuenten una historia de un padre guay, un padre cool, moderno, amigo de sus hijos…. pero escuchando atentamente la letra (todo lo atentamente que se puede escuchar esta canción), creo que tampoco es el mejor ejemplo de relación paterno filial

Creo que no hace falta que lo explique, pero por si acaso. Todo esto es una coña, y no quiero que se cambie ninguna canción de las del post, ni de las que no están en el post. Que cada uno cante como quiera, lo que quiera y le ponga las letras que le de la gana. Eso sí, si los de la Tuna pueden cantar un poco más bajito… y más lejos… Si puede ser, pero vamos, que no voy yo a coartar su libertad y que sigan dando brincos con los clavelitos de su corazón, colorados igual que un fresón.



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