En estas fechas tan señaladas

No, no voy a soltaros el discurso del Rey, ni decir que me llena de orgullo y satisfacción escribir sobre la Navidad. Ya os conté cómo era el guion y algunos consejos a seguir en las cenas con amigoso y compañeros de trabajo. Hoy os voy a hablar sobre la cena de Nochebuena . No hay un modelo único, y cada familia o grupo lo celebra de maneras distintas, pero estoy seguro que os sentiréis identificados con algunos de los ejemplos que paso a relatar. Dónde y con quién Mucho más difícil que el qué cenar, está el dónde y con quién. Es una decisión complicada que provoca cienes y cienes de discusiones en las parejas (en todas, hasta en las de la Guardia Civil). Cuando eres pequeño no hay discusión posible, irás donde te digan que vayas, y no hay más que hablar. Bueno puedes hablar, pero te va a dar lo mismo. “Pues yo no quiero ir a casa de la tía de Cuenca”, “pues te quedas tu aquí solo y te comes un bocata”, dirá tu madre. Y ahí te ves, tan feliz tú solo, sin tener que