Así fue o podría haber sido

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¿Habéis recibido alguna vez un mensaje de WhatsApp de alguien que no conocéis? ¿Nunca? Un chico me había conocido en una discoteca y quería volver a verme. Le había dicho que me llamaba Susan. Y ahí le tenías, buscando a Susan desesperadamente. Estuve a punto de llamarle y quedar. Pero resulta que nos habíamos visto en un garito de Houston. Claro, ahí teníamos un problema. Típico de Houston. El caso es que, como ya sabéis, yo no me llamo Susan y nunca he estado allí (eso no lo sabíais). Así que tuve que declinar la oferta. En otra ocasión me escribieron para comprarme un reloj. Que yo al mío le tengo mucho cariño, pero es que me ofrecían 10.000 francos suizos. Lástima que no tengo ningún Rolex a la venta. Otros me escriben para cambiarme de compañía. Con lo que me gusta a mí la compañía que tengo. Que no les cambio por nada del mundo. Buena gente, amigos de sus amigos y siempre están ahí. O aquí. Según el momento. Ya me entendéis. Pero esta semana, me pasó una cosa notable. He

Elizabrexit II y Primera para salir de Europa

No os lo vais a creer (y haréis bien), pero me ha llegado de muy buenas fuentes (mejor que Neptuno y la Cibeles) un documento en el que está detallada la reunión entre la reina de Inglaterra y Boris Johnson.
A ella la reconoceréis porque sale en una serie de Netflix, en las libras esterlinas y en el himno de Gran Bretaña. A ella es a la que dios tiene que salvar. God save the Queen dicen allí. A los demás no hay quien nos salve.
Boris Johnson es el nuevo Primer Ministro de Gran Bretaña, United Kingdom, o “guayominí catre puá”. El caso es que es el que manda allí. Lo reconoceréis de la foto de arriba por ser el que no lleva bolso y por no haber ido a la peluquería. Antes de ser Primer Ministro también llevaba el pelo raro, no va con el cargo. Que mira Margaret Thatcher la de horas que echaba siendo Primera Ministra y llevaba el pelo como cualquier señora con posibles. Con la de laca que gastaba se cargó la capa de ozono.
En la foto anterior el pelo de la señora Thatcher es natural, la cara de cemento viene de serie en los políticos.
El caso es que los británicos ya no quieren estar en la Unión Europea pero no se ponen de acuerdo en cómo irse. ¿Me tengo que despedir? ¿Me voy a la francesa, sin decir nada? ¿Me salgo ya o me quedo un poco más? Venga una más y ya me voy. 
Y así llevamos tres años. ¡Que me voy! ¿O me quedo? ¿Votamos para ver qué queremos ahora? Y en Europa diciendo que vale, que te pires, pero devuélveme el rosario de tu madre, y cuidadito con Irlanda que a ver si la vas a romper. Bueno vamos a negociar. Pero negociamos a mi manera. Y ha llegado Boris Johnson a salvar el mundo y que ya está bien. Vamos, que nos vamos.
Boris, vamos a llamarle así, que ya tenemos confianza, ha dicho que Gran Bretaña ya no juega más. Que nos vamos con acuerdo o sin acuerdo. Brexit duro o Brexit de Jijona. Y como de Europa no quiere nada, pues va a ser duro. Muy duro. Como la cara de los políticos. Y para eso se le ha ocurrido que ya no hay más que hablar. Que ya han hablado demasiado en el Parlamento y que mejor lo cerramos y punto y pelota. Ni acuerdo ni acuerda.
Pero cerrar el Parlamento no es tan fácil. Hay que pedir permiso. Ya sabéis que los británicos son muy de pedir las cosas por favor, please y thank you. No se andan con chorradas. Si quieres cerrarlo se lo pides a la Reina. Es como cuando eras pequeño y querías algo, tu padre te decía. Habla con tu madre… Pues vas y hablas con Isabel 2 (el Retorno). Desconozco si para cerrar un bar allí también hay que pedir permiso a la reina, pero sus nietos sí que tienen que pedir permiso a la abuela para cualquier cosa. Lo mejor es que le hagas caso, que tiene un carácter…
Pues os voy a contar cómo fue la reunión entre Boris y la Reina. Es posible, que la fuente no fuera tan buena y las cosas hayan sido algo diferentes.  O a lo mejor no…

Lacayo 1: Su Majestad, acaba de llegar el Primer Ministro, Boris Johnson. ¿Le hago pasar?
Su Graciosa Majestad: ¿Quién? Pues no teníamos una señora de Primera Ministra.
Lacayo 2: Renunció y el elegido para sucederle es Boris Johnson. Estuvo hace poco con usted, Su Majestad.
SGM¿El rubio despeinado? ¿Pero ese no era el Presidente de Estados Unidos?
Lacayo 3: (como veis, la Reina tiene muchos lacayos alrededor, por eso tiene un palacio tan grande con tantas habitaciones): Ese es Donald Trump. También vino a Palacio pero acompañado de su esposa, Melania Trump.
SGM: Ah, sí. La que tiene cara de sospechar de todo el mundo y que no habla bien inglés. ¿No les enseñan inglés en Estados Unidos?
Lacayo 4: Su Majestad, Melania es de Eslovenia y se casó en segundas nupcias con Donald Trump
SGM: ¿Eslovenia? Suena bien... ¿Yo soy reina de Eslovenia también?
Lacayo 5: No, Su majestad, Eslovenia es un país independiente. Formaba parte de la antigua Yugoslavia, la que gobernó Tito durante tantos años.
SGM: ¿Tito? ¿Y el Piraña era el Ministro de asuntos exteriores? Hahaha(los ingleses se ríen así, sin jotas ni nada). Soy la bomba. Anda, lacayo 1, prepárame el gin tonic de las 9 de la mañana.
Lacayo 1: ¿Beefeater o Larios? Su Majestad
SGM: Ponme uno de cada. Y rapidito que luego he quedado para echar un bingo con las del cole. Lacayo 2, Por favor, envíales un whatsapp diciendo que no empiecen sin mí. Que llegaré en media hora.
Lacayo 2: En seguida Su Majestad. ¿Algún Emoji?
SMG: Ponles el de la berenjena que les hace mucha gracia. Bueno, vamos allá.
Boris: Majestad. ¡Está usted radiante!
SGM: Al grano. ¿Qué quieres?
Boris: Pues verá. Me gustaría cerrar el Parlamento.
SGM: ¿Qué le pasa al Parlamento? ¿Hay que hacer reformas y quieres que las pague? Ya os dije que ni una libra más para vuestros caprichos. Si queréis dinero, se lo pedís a los de siempre. ¿No hay gente que paga impuestos?
Boris: No es eso, Su Majestad. Es que quiero cerrar el Parlamento durante 5 semanas.
SGMTenéis más vacaciones que el sastre de Tarzán ¿Queréis más? ¿Aquí la única que trabajo soy yo o qué?
Boris: Es por el tema del Brexit, Su Majestad. Si cerramos el Parlamento evitamos que los miembros del Parlamento frenen la salida de la Unión Europea. Debemos cumplir el mandato de la ciudadanía y salirnos, cueste lo que cueste.
SGM: Nunca debimos entrar y juntarnos con esa chusma.  
Lacayo 1: Aquí tiene sus gin tonics, su Majestad.
SGM: Gracias…. ¿Cómo te llamabas?
Lacayo 1: Manuel, Su Majestad
SGM: Esto está lleno de extranjeros. Y mi nieto se casa con una latina.
Boris: Por eso es importante que firme usted el cierre del Parlamento y acabar de una vez por todas con…
SGM: Lo que tú digas… Por cierto, conozco un peluquero que te podría arreglar ese nido de cigüeñas que tienes en la cabeza. Dile que vas de mi parte.
Boris: Gracias su Majestad, Y muchas gracias por el gin tonic.
SGM: Gin tonic ¿Tan pronto? Estoy rodeada de vagos y maleantes. No quieres trabajar y ahora también te vas a beber mi ginebra. Nada de eso.
Boris: Perdón, Su Majestad. Yo…
SGM: Ni ginebra, ni ginebro, que eres muy joven para andar bebiendo tan temprano. Bueno, ¿Dónde hay que firmar?
Lacayo 7: Majestad, el coche ya está preparado. Cuando quiera puede ir a… bueno ya sabe. Su reunión…
SGM: ¿Coche? Iba a ir en transporte público
Lacayo 8: Pe… pero…
SGM: En transporte público. Que para eso lo pagáis entre todos..
Boris: Su majestad… Por su seguridad
SGM:  Hahahaha! (porque los ingleses sólo ponen signos de exclamación o interrogacion al final... Por ahorrar, será). ¡Que cara de tonto se te ha puesto…! ¿O ya la traías? Hahahaha. En transporte público yo… hahahaha.  Ponme los gintonics en un tupper que me los voy bebiendo por el camino. 

Y así es como tuvo lugar el cierre del Parlamento. Puede que no haya sido exactamente, así como os lo he contado, pero ya sabéis que se pierden matices con la traducción.  
Si os estáis preguntando por qué la Reina sale con tres vestidos diferentes, eso es un tema de los lacayos. Que para estar entretenidos van cambiando de ropa a Su Graciosa Majestad… Que igual tampoco es tan graciosa… ¿O si?




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