Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como estupefacto

Así fue o podría haber sido

Imagen
¿Habéis recibido alguna vez un mensaje de WhatsApp de alguien que no conocéis? ¿Nunca? Un chico me había conocido en una discoteca y quería volver a verme. Le había dicho que me llamaba Susan. Y ahí le tenías, buscando a Susan desesperadamente. Estuve a punto de llamarle y quedar. Pero resulta que nos habíamos visto en un garito de Houston. Claro, ahí teníamos un problema. Típico de Houston. El caso es que, como ya sabéis, yo no me llamo Susan y nunca he estado allí (eso no lo sabíais). Así que tuve que declinar la oferta. En otra ocasión me escribieron para comprarme un reloj. Que yo al mío le tengo mucho cariño, pero es que me ofrecían 10.000 francos suizos. Lástima que no tengo ningún Rolex a la venta. Otros me escriben para cambiarme de compañía. Con lo que me gusta a mí la compañía que tengo. Que no les cambio por nada del mundo. Buena gente, amigos de sus amigos y siempre están ahí. O aquí. Según el momento. Ya me entendéis. Pero esta semana, me pasó una cosa notable. He

Mis palabras favoritas. Capítulo I, de la A a la M.

Imagen
¿Tú no tienes palabras favoritas? Yo sí. Muchas. Y no todas me gustan por la misma razón. Unas me hacen gracia (aunque puede que no sean graciosas para nadie más), otras por su sonoridad, porque son onomatopéyicas (ejemplo de palabra bonita), porque se han pasado de moda o las utiliza todo el mundo. Ya se sabe que sobre gustos no hay nada escrito…   o sí. Siempre al límite, voy a escribir sobre gustos, sobre los míos. Tengo que especificar que sólo voy a utilizar palabras en castellano. Hay palabras en otros idiomas que me gustan también… aunque no sepa que significan, ni cómo se pronuncian. Tengo que confesar que hay algunas palabras españolas que he escogido que tampoco sé muy bien lo que significan, ni su etimología, ni su taxidermia… del griego taxi (vehículo con conductor que habla por los codos) y dermia (tener un poco de fresquito… si te pasas de frío se llama hipodermia y mejor que te abrigues). Prometo no abrumaros con muchas palabras, y además os lo divido