Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como chotis

Así fue o podría haber sido

Imagen
¿Habéis recibido alguna vez un mensaje de WhatsApp de alguien que no conocéis? ¿Nunca? Un chico me había conocido en una discoteca y quería volver a verme. Le había dicho que me llamaba Susan. Y ahí le tenías, buscando a Susan desesperadamente. Estuve a punto de llamarle y quedar. Pero resulta que nos habíamos visto en un garito de Houston. Claro, ahí teníamos un problema. Típico de Houston. El caso es que, como ya sabéis, yo no me llamo Susan y nunca he estado allí (eso no lo sabíais). Así que tuve que declinar la oferta. En otra ocasión me escribieron para comprarme un reloj. Que yo al mío le tengo mucho cariño, pero es que me ofrecían 10.000 francos suizos. Lástima que no tengo ningún Rolex a la venta. Otros me escriben para cambiarme de compañía. Con lo que me gusta a mí la compañía que tengo. Que no les cambio por nada del mundo. Buena gente, amigos de sus amigos y siempre están ahí. O aquí. Según el momento. Ya me entendéis. Pero esta semana, me pasó una cosa notable. He

De aquí, de Madrid

Imagen
Permitidme que hoy me mire al ombligo (en sentido figurado, que os lo creéis todo y además hay ombligos que molan mucho más que el mío… También los hay más feos, como esos que parecen garbanzos en remojo). Quiero decir que hoy voy a escribir sobre cómo hablamos los de aquí, de Madrid. ¿Os habéis dado cuenta que si a algún madrileño le preguntan de dónde es siempre dice: “de aquí de Madrí”? Da igual si estás en Madrid o en la China Popular (Carod dixit) que dirás lo mismo. Y el chino te mirará con los ojos como platos (de esos en los que se ponen las aceitunas y los boquerones en vinagre, pero platos), porque tú se lo dirás con perfecto acento madrileño. Y no sólo decimos que somos de Madrid, sino del barrio o el pueblo. De Madrí, Vallecas, Carabanchel, La Elipa, Móstoles, Fuenla o el Barrio de Salamanca (éstos no hace falta que lo digan, se les nota… bueno, en realidad se nos nota a todos).  A veces no hace falta que lo digamos. Los madrileños tenemos acento, aunque creamo